Sin importar quiénes somos o de dónde venimos, el éxito en la vida empieza en el hogar. Cuando todos vivamos en hogares seguros, los padres de familia ganen más, los niños aprendan mejor y mejore la salud y el bienestar de todos, nuestras comunidades serán más fuertes y nuestra región tendrá los elementos necesarios para prosperar. Pero en estos momentos los promotores inmobiliarios y los propietarios corporativos ricos y poderosos controlan el mercado de la vivienda en California y gastan millones en cada elección para hacer que los votos estén a su favor. Usan estrategias predatorias para aumentar sus ganancias en momentos en que los californianos de la clase trabajadora no pueden ni siquiera pagar su renta o sus hipotecas. Esto afecta en particular a las personas de color, a las familias trabajadoras, a los adultos mayores y a las personas que tienen discapacidades.
Bay Rising Action apoya votar NO a la Proposición D. San Francisco está saturada de viviendas al precio del mercado y los grandes promotores inmobiliarios y los propietarios corporativos están haciendo que cada vez más personas de la clase trabajadora y de color tengan que salir de la Ciudad debido al alto costo de la vida. La Proposición D cambiaría la definición de vivienda asequible haciéndola más costosa de lo que es. Con la Proposición D, un apartamento de una habitación que cuesta casi $4,000 al mes sería considerado una “vivienda asequible” aunque el precio en el mercado actual es $3,095 al mes. Esta medida tampoco incluye requisitos para construir unidades de dos o tres habitaciones lo que significa que los promotores inmobiliarios no construirán las viviendas que necesitan las familias de San Francisco.
Necesitamos más viviendas verdaderamente asequibles en nuestra Ciudad si queremos hacer frente a la falta de hogar y hacer que San Francisco vuelva a estar en buen camino. La Proposición D haría más fácil que los avaros promotores inmobiliarios ganen más dinero a través de unidades que no son asequibles para la familia trabajadora promedio.