Esta medida, apoyada por la Asociación Progresiva de Richmond, recaudará un impuesto sobre los ingresos brutos de los negocios de la ciudad (un impuesto sobre sus ingresos totales) para financiar los servicios de emergencia del 911, la reparación de baches/calles, servicios para desamparados/jóvenes y otros servicios de la ciudad. El impuesto sería entre 0.06% y 5% de los ingresos brutos y la mayor cantidad sería pagada por compañías de cannabis, armas de fuego y las corporaciones más grandes. Esta medida exonera a las pequeñas empresas que ganan menos de $250,000 en ingresos facturables brutos y recaudaría aproximadamente $9.5 millones al año para los servicios de la ciudad.